Durante estos meses no ha habido apenas actividad en nuestro portal ya que hemos estado bastante ocupados preparando la respuesta a la consulta pública del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital sobre la liberación de la banda de los 700 Mhz; en lo que ha sido el desarrollo de un elaborado documento de más de 40 páginas; y que, tal y como adelantábamos en Twitter, fue enviado en una primera versión el pasado 15 de Febrero y al cual le siguió una segunda el 18 de Febrero, apurando al máximo los limites del plazo fijado, para presentar uno de nuestros mejores trabajos como recopilación de muchas de las inquietudes expresadas en «Frecuencia Nueva» realizado con el mayor esmero, calidad y dedicación.
Así que, con todo ello, lo que pretendemos es ayudar en lo posible a la Administración a abordar decisiones que entendemos que no serán fáciles, en primer lugar, por la cantidad de opciones existentes y las tecnologías implicadas; pero también porque, como explicábamos en nuestra introducción, nunca existen soluciones ideales que puedan llover al gusto de todos, sino aquéllas que, valoradas en sus beneficios una vez restados sus inconvenientes, mejor se adapten a las necesidades y circunstancias de cada entorno, y en concreto al entorno de nuestro propio país.
Y es que debemos insistir en este aspecto. La tecnología en sí misma nunca es el fin, sino el medio. Es decir, la mejor tecnología puede volverse ineficaz si no se sabe utilizar, o si se utiliza para fines distintos a los previstos, o si no se le sabe dar la utilidad real de acuerdo a las necesidades, posibilidades y dificultades derivadas de su aplicación y lo que se pretende conseguir con ella. O dicho de otro modo más concreto. La tecnología siempre tiene que ponerse al servicio de los objetivos reales del usuario y no los objetivos al servicio de los intereses comerciales que coyunturalmente interesen para imponer una determinada tecnología.
Por eso nosotros lo tenemos muy claro, y así lo hemos expresado nuevamente en la introducción a nuestra aportación. El segundo Dividendo Digital tiene que ir más allá de una simple reordenación de frecuencias y servir como una segunda oportunidad para resolver aquellas deficiencias que desgraciadamente aún se sigan detectando por una red de difusión que no ha previsto lo suficiente ciertas particularidades de la TDT y por una planificación de frecuencias que creemos que igualmente no ha sido suficientemente depurada.
Porque, como sabemos, España cuenta con una realidad bastante compleja, empezando por sus variables orográficas y medioambientales que en unos casos limitan la señal y en otros la propagan en exceso; siguiendo por una población más dispersa de lo que creemos en forma de numerosos municipios repartidos a o largo de todo territorio; y terminando por el crecimiento exponencial que en los últimos años también ha experimentado su oferta televisiva junto a una excesiva fragmentación de la misma, siendo hasta siete veces más que la que ya teníamos a principios de los noventa.
De hecho, ahora nos encontraríamos con el siguiente paradigma. En primer lugar, cómo la actual masificación de canales ha derivado igualmente en una devaluación de las propias licencias que a veces han terminado, o bien incumpliendo sus fines (como es el caso de muchas de las televisiones locales en Madrid), o bien siendo vendidas, o bien convirtiéndose en fórmulas de programación alquilada a terceros, tal y como por cierto relata una noticia en relación a unas declaraciones de Paolo Vasile, presidente de Mediaset España. Y en segundo lugar, cómo gestionar toda esa extensa oferta ante un espacio radioeléctrico cada vez más escaso; de manera que lo que nunca debemos perder es la prioridad por la necesidades más básicas de la población en cuanto a calidad y capacidad de recepción; ya que al fin y al cabo el acceso a la televisión gratuita es un derecho que debe asistir a todos los ciudadanos con independencia del lugar en el que vivan y sus condiciones económicas.
Por otra parte, nos congratula observar que parte de nuestras apreciaciones coinciden con «Televisión Abierta», una de las principales asociaciones del sector; especialmente la relacionada en señalar que el margen de tiempo establecido para ejecutar el anterior Dividendo Digital fue muy escaso y que a la industria apenas le dio tiempo a reaccionar a la fuerte demanda generada por técnicos e instaladores.
Y a ello añadiríamos más, ya que creemos fundamental la realización previa de un estudio técnico en las zonas geográficas más complejas (como es la relacionada con comunidades autónomas y provincias colindantes), a fin de que el nuevo plan técnico nacional sea mucho más robusto y acertado, y a lo cual hacemos referencia con diversas medidas y propuestas en respuesta a la pregunta número 4. También estamos de acuerdo en que el segundo Dividendo Digital no debe suponer un recorte de la actual oferta, pero debiendo introducir sistemas como el DVB-T2 que permitan precisamente su mantenimiento; ya que no vemos posible que sea de otro modo tras el reducido espacio radioeléctrico que quedará tras la liberación de la banda de los 700 Mhz (actuales canales 49 a 59 de UHF).
Ahora bien, en lo que sí nos distanciamos más es en el 4K en TDT, y no tanto porque no nos parezca interesante esta tecnología, sino porque, como ya hemos comentado, creemos que hay antes otras prioridades que atender como es la mejora de la capacidad de recepción de la población; de manera que lo que no podemos hacer es convertir lo accesorio en fundamental y lo fundamental en accesorio, teniendo en cuenta que hoy por hoy los contenidos son todavía escasos; y sobre todo, que la capacidad operativa de los actuales centros de producción aún se encuentran en una fase un tanto incierta; ya que apenas han tenido que hacer unas fuertes inversiones para adaptarse a la alta definición y ahora se verían obligados a seguir invirtiendo en nuevos estudios de realización y continuidad sólo porque toca emitir en 4K.
Finalmente, otra de las cuestiones que también echamos de menos de «Televisión Abierta», al menos por lo que hemos leído hasta ahora en diversos diarios, es una cierta reivindicación del satélite; capítulo al cual sí le dedicamos nosotros, pues creemos que por ejemplo nuestro Hispasat en materia de televisión se ha quedado muerto, y sin embargo, sería una gran opción como complemento a la TDT actual sin las limitaciones constantes del espectro radioeléctrico a las que nos vienen obligando, y sobre todo, de cara a esas mismas emisiones en 4K que consumen bastantes recursos.
Así que de todo ello, pues, hablamos detenidamente a lo largo de todo nuestro documento respondiendo a las diferentes preguntas correspondientes al bloque 1 «Liberación de segundo Dividendo Digital», al bloque 4 «Coexistencia entre las emisiones de servicios de banda ancha inalámbrica en la banda de 700 Mhz y las emisiones de servicios de radiodifusión en la banda inferior a 700 Mhz» y al bloque 5 «Evolución tecnológica futura de la TDT»; en lo que se trata, como decimos, de todo un trabajo muy elaborado, que no sólo se limita a responder, sino también a explicar y a aportar medidas, propuestas y soluciones, como es nuestra filosofía, que puedan satisfacer a todos los agentes afectados y al cual le acompaña también toda una extensa bibliografía; como corresponde a la seriedad de nuestros artículos y publicaciones.



Escrito por Frecuencia Nueva. Enlaces relacionados:
- Consulta pública del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital sobre la hija de ruta del proceso de autorización de la banda de frecuencias de 700 Mhz para la prestación de servicios de comunicaciones electrónicas de banda ancha inalámbrica. Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital. 28 11 2017.
- Agenda Digital abre una consulta pública sobre la banda de 700 Mhz. Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital. 28 11 2017.
- Nuevos pasos hacia el segundo Dividendo Digital: consulta pública para liberar la banda de 700 Mhz. Grupo Lasser. 04 01 2028.
- El sector de la TDT pide al Gobierno que garantice su capacidad actual y evolución tras el segundo Dividendo Digital. Europa Press. 27 02 2028.