Las antenas de Navacerrada, conocidas como «la Bola del Mundo», también envueltas en la polémica

Y después de la serie de artículos que llevamos dedicando a este tema, dado su amplitud, finalmente llegamos a la parte más polémica.

Unos como Jacobo de Pedro en su web mazochungo.net y la página de Facebook “Indignados por el apagón de Navacerrada llevan insistiendo en su reapertura desde que se produjo el apagón analógico en Abril de 2010.

Otros  incluso las ven como un icono que forma ya parte de nuestro patrimonio histórico, habiéndose integrado en el paisaje durante tantos años que no lo reconocerían sin ellas, como explica Manuel Fernández en el Adelantado de Segovia. Y, aunque resulte un tanto irónico, hasta algún intelectual podría observarlas como una obra más del arte contemporáneo, con esa forma tan singular de estación espacial, que le ha valido el cariñoso nombre de “el Cohete de Tintín”.

( Fuentes: http://www.mazochungo.net/old/television/bola.htm y Wikipedia)

Sin embargo, también hay quienes en el polo opuesto pueden representarles chatarra vieja de franquismo trasnochado, considerándolas  “basura tecnológica, como así las denomina el escritor Julio Vías en change.org, ensuciando el emblemático paraje madrileño; y pidiendo, por tanto, que las famosas antenas se conviertan en comida de vertedero.

Bien, lo primero que yo precisaría es que estas instalaciones no se pueden considerar como completamente clausuradas al continuar operativas las estaciones de frecuencia modulada tanto de Radio Nacional de España como de Onda Madrid.

Pero sobre todo calificarlas en términos de “basura tecnológica” me parece impropio y desacertado; pues como expresa en su blog, sería como decir que las instalaciones han quedado tan obsoletas que de puro viejas se han hecho inservibles; y que, por tanto, ya no pueden ni siquiera ser reutilizadas adaptándolas a la revolución tecnológica de los últimos tiempos. Y esto no es así, pues como ya hemos explicado, salvo en algunas muy antiguas como las antenas de VHF, lo que se ha producido no ha sido una obsolescencia de dichas instalaciones, que podrían seguir funcionando perfectamente con la TDT (tal y como se demostró en los apenas dos meses que Telemadrid estuvo emitiendo en el múltiplex 41), sino una inutilización preconcebida en base a unos argumentos técnicos y de mantenimiento manejados por aquel entonces, y que a tenor de la realidad actual y lo expresado en diversos foros, siguen sin resultar del todo convincentes.

Efectivamente, como ya comentamos, desde que se produjera la clausura de las llamadas antenas de televisión de «la Bola del Mundo» haciéndolo coincidir con el apagón analógico de 2010 curiosamente se han producido importantes carencias de recepción en la región, que ha dado lugar a que numerosos ayuntamientos tengan que licitar la instalación de reemisores, que multiplican el impacto medioambiental (ya que de eso hablamos) al tiempo que se incrementa el gasto a costa de estos mismos ayuntamientos una vez que la Comunidad de Madrid ha decidido  ir extinguiendo este año las subvenciones destinadas a su financiación.

Es más, lo más curioso es que siendo una decisión tomada desde Abertis y el Ministerio de Industria sus consecuencias tienen que ser reparadas por unas corporaciones locales que entiendo no han participado en esa decisión, ni les correspondía, ni han sido llamados a formar parte; encontrándose de repente con el problema bajo el único argumento de que la señal de TDT «tiene menor penetración en las zonas con orografías más complejas» y asumiendo los costes por el mantenimiento de los citados reemisores, que antes no necesitaban, ni necesitarían si las conocidas antenas de «la Bola del Mundo» emitiesen en TDT.

Alcaldes convenio TDT
Alcaldes de Boadilla, Villanueva de la Cañada, Villanueva del Pardillo y Villaviciosa de Odón firmando un convenio para la financiación y mantenimiento del centro emisor de TDT situado en las instalaciones del Canal de Isabel II de Majadahonda con un coste de 22.782 € + IVA al año, y otros 12.000 € + IVA para su adaptación al Dividendo Digital. Este centro se añade a otros reemisores como el situado en el Cerro de San Babilés y en la calle Monte Romanillos, también en Boadilla, o el situado en la Urbanización “El Bosque” en Villaviciosa de Odón (Foto: web del ayuntamiento de Boadilla del Monte)

Por eso hay quienes ante el temor de quedarse sin televisión han terminado por acatar la situación. Éste es el caso del convenio firmado el pasado diciembre por los municipios de Boadilla del Monte, Villanueva de la Cañada, Villanueva del Pardillo y Villaviciosa de Odón (tal y  como publican la  web del Ayuntamiento de Boadilla y la web de Villaviciosa de Odón). Pero también hay quienes como el alcalde de Robregordo, consideran que todo esto les supone un gran perjuicio como podemos leer en Sierra Norte Digital.

Por otra parte, en cuanto a la “peligrosa fuente de radiaciones electromagnéticas” a las que también alude Julio Vías en su blog, pienso que resulta más sano situar un centro emisor (aunque sea de mayor cobertura) en un lugar totalmente alejado de cualquier núcleo de población, que la proliferación de múltiples reemisores alrededor de las diversas localidades afectadas próximas a las viviendas; pues en la exposición a tales radiaciones no sólo importa la potencia, sino la intensidad de campo por metro cuadrado en proporción a la cercanía al centro emisor.

Además, insistiendo en que son unas instalaciones que se les ha dejado arrinconadas, pero que pueden seguir prestando servicio ¿y si a parte de encenderlo de nuevo para la televisión, aprovechando su estratégica ubicación pudiéramos atribuirle algún servicio adicional en VHF para que montañeros que quedasen atrapados (en unas inmediaciones que pueden ser bastantes kilómetros), puedan tener una conexión directa con la Guardia Civil y los servicios de emergencia para ser rescatados? Posiblemente lo veríamos de forma diferente. Así que todo depende del valor que otorguemos a las cosas y la capacidad para sacarles provecho.


Conclusiones

Como resumen a este tema dedicado a lo largo de estos artículos, con la vuelta de las emisiones de Navacerrada se propiciaría que llegara la TDT a muchas zonas de sombra de la Comunidad de Madrid, eliminando el costo de microemisores innecesarios y evitando nuevas antenas en muchas de estas poblaciones.

Torre antena Jacobo
Torreta para recibir Torrespaña desde Las Rozas ante el apagado de las antenas de «La Bola del Mundo», publicada en un artículo de Jacobo de Pedro que no tiene desperdicio “Historia de una antena” (véase enlaces relacionados)

En segundo lugar, se permitiría el intercambio de televisiones autonómicas de comunidades vecinas que comparten lazos históricos y culturales comunes; en lugar de ocupar innecesariamente el espectro con excesivas emisiones de teletienda o incluso canales ilegales dedicados a videncia . Podríamos atribuirle algún servicio adicional que ayudara al rescate de montañeros atrapados. Refiriéndome a las palabras del entonces alcalde de Madrid D. Alberto Ruiz Gallardón dispondríamos de otro gran centro emisor alternativo ante cualquier posible contingencia que sucediera en Torrespaña.

Y sobre todo dejar inutilizadas unas infraestructuras que han supuesto unas fuertes inversiones a lo largo de los años, es como sustituir una gran casa de piedra que me puede seguir resguardando eficazmente del frío y del calor, por muchas de ladrillo con su correspondiente sistema de calefacción y aire acondicionado, más su consumo, más su mantenimiento, si quiero parecerme a lo que antes tenía.

Bien es cierto que la televisión siempre puede representar un tema menor respecto a otras prioridades. Pero en cualquier caso, cuando se trata de adoptar medidas para garantizar el acceso a cualquier servicio público gratuito y con el menor coste para las administraciones, pienso que tendría que ser una cuestión a considerar; y más cuando la decisión de cerrar Navacerrada pudiendo emitir en TDT parece resultar un tanto contradictoria al concepto de ahorro y reciclaje que tanto se promueve para maximizar la vida útil de los recursos que disponemos.

Por eso terminaré con la misma pregunta con la que comenzamos estos cuatro artículos, que es más una propuesta que una pregunta ¿y si volviera a emitir Navacerrada?


Elaboración propia de nuestro blog Frecuencia Nueva. Enlaces relacionados: