La antena es el elemento clave de toda una instalación. No hay antenas mejores o peores sino las antenas adecuadas para cada caso y nuestras necesidades. Así que según el número de emisoras que quieras recibir y las condiciones en las que te encuentres, así necesitarás unas u otras. Veamos los tipos más comunes que podamos encontrarnos en las tiendas:
Antenas de panel

Como vemos, se componen de cuatro dipolos apilados verticalmente y un reflector. Están especialmente indicadas para captar la señal de diferentes centros emisores cercanos. Su estructura además las hace más resistente al viento ya que no contienen elementos que sobresalgan. Su ganancia está en torno a los 12 Db.
Antenas de alta ganancia
En este apartado podemos englobar diversos tipos de antenas, cuyo nombre obedece a modelos y diseños concretos de cada fabricante, pero que todas ellas tienen en común el ser altamente directivas, con una elevada ganancia, y por tanto, muy buenas en caso de que queramos captar una emisora determinada de televisión, y sólo esa, con grandes problemas de interferencias y debilidad de señal.

Como ejemplos podemos citar las Antenas V, de Televés, las DAT HD Boss (que son una derivación de las DAT45 y 75 también de Televés), las Antenas Diana de Fagor Electrónica (que tienen forma romboidal) o las Mandarine de Tecatel que recuerda a las primeras Antenas Gama Pro de Televés. Para saber la que más nos conviene entre todos los diseños y formas el elemento clave es la ganancia, cuyo valor más alto suele coincidir con la más larga y desgraciadamente, la más grande.
Antenas de interior
Alternativa fácil para situaciones donde la señal a recibir sea fuerte. Con la TDT son cada vez más pequeñas, manejables y transportables. Algunas tienen diseños para poder disimularlas con el resto de la decoración, sin parecer que realmente es una antena; pero ante situaciones especiales nunca podrán sustituir las prestaciones y la calidad de imagen de una buena antena de tejado. Además, todas ellas incluyen en su interior un pequeño amplificador de banda que obliga a alimentarlas, que no siempre es de buena calidad, y que también impide utilizarlas simplemente como antena pasiva, es decir, sin amplificación alguna.
Antenas especiales

Son antenas para usos concretos. Por ejemplo las antenas para caravanas, que están a mitad de camino entre una antena exterior y una interior, porque están preparadas para colocarlas como cualquier antena de tejado, pero al mismo tiempo llevan incorporada la amplificación de la señal, y por tanto, según qué modelos, también han de alimentarse para que funcionen o para sacar su máximo rendimiento. La verdad es que estas antenas están bien para hacer pequeñas exploraciones experiementales, sin la aparatosidad de una antena de grandes dimensiones, y al mismo tiempo sin las escasas prestaciones de una simple antena de interior.
Conclusiones
En general, cuanto más larga y sofisticada sea una antena, más direccional será al tiempo que mayor será su ganancia. Cuanto más simple, según los casos, más omnidireccional, pero también menor ganancia tendrá para recoger la señal de cada una de esas direcciones. En situaciones complicadas las antenas x y especialmente las antenas de gama pro las podemos apilar, es decir, podemos conectar dos en paralelo mediante un acoplador especial, para aumentar aún más la ganancia.